Para conseguirlo, comienza por determinar exactamente lo que necesitas y deseas guardar. No en cantidad de prendas, me refiero a espacio que ocupan esas prendas del presente y lo que ocuparán las que compres en el futuro. Se trata de calcular cuantos metros lineales se necesitan para ropa larga, corta, intermedia, zapatos y complementos. Teniendo en cuenta que, en una barra de un metro caben unas 10 chaquetas, 18 camisas o, 20 pantalones. Y que, en un estante, balda o entrepaño, se pueden amontonar hasta (por ejemplo) 5 jerséis, que suman unos 25 cm. de altura. Y al ser el estante de unos 55 cm. de fondo útil, se puede colocar en el fondo la ropa de fuera de temporada y en el frente la de temporada actual. Y una vez al año (con el cambio de estaciones) dar la vuela; lo del fondo al frente y viceversa.
¿Qué ropa doblada no conviene colocar en estantes?
La ropa de interior, por eso, mejor en cajones. Por lo tanto, si los cajones son solo para ropa de interior, quizás, no necesites tantos cajones como te parecía antes de leer esto. Y ahora, lo más posible es que prefieras más estantes.
La ropa que no utilizaste durante más de un año es posible que no la vuelvas a utilizar nunca, por eso, regala, dona, desecha o elimina, aquellas prendas o accesorios que ocupan espacio innecesario.
Organizar los armarios:
- Por colores: Un mismo color con varias prendas de distintos tonos. Ordenar de color claro a más oscuro y de izquierda a derecha.
- Por tipo de prenda: Según la utilización, (por ejemplo) en un sitio las prendas deportivas, en otro las prendas de trabajo, de vestir o de casa. Así, se organiza de forma que se facilita la búsqueda.
- Por estación del año: Se puede combinar una organización por color y prenda, pero de acuerdo con la estación del año. Por ejemplo, en una percha se pueden colocar tres prendas del mismo color para distintas épocas. Ahora bien, dependiendo de la estación del año, poner en la parte más externa de la percha las prendas más utilizadas, por ejemplo; en verano ubicar las camisas de manga corta y en invierno las de manga larga.
Organización de las chaquetas, pantalones y faldas
En el caso de las chaquetas o americanas, se pueden colgar en una percha junto con el pantalón que combina.
En cuanto a los pantalones, conviene colgar en una misma percha los pantalones de acuerdo con el estilo que tengan. Además, hay perchas específicas para los pantalones en las cuales se pueden colgar hasta cinco. Por otra parte, para las faldas se pueden utilizar perchas de pinzas para evitar que se arruguen.
Organización de los trajes y vestidos
La organización de estos tipos de prendas es muy importante pues generalmente están fabricados de un material que requiere mucho cuidado.
Para los trajes, lo ideal es utilizar perchas de madera. Estas evitan que se dañen o deformen las chaquetas, también pueden ser perchas de plástico, pero añadiendo hombreras.
Para los vestidos con tirantes, lo ideal es utilizar perchas de solapas para evitar que se resbalen.
Utiliza un solo tipo de percha, ya que utilizar varios tipos da un aspecto del armario desordenado y para nada atractivo.
Organización de los zapatos y accesorios
Por lo general, los zapatos se ubican en el suelo de los armarios. Después de analizar muchas formas de guardar los zapatos, llegamos a la conclusión de que lo más útil es debajo de los cajones, en un estante extraíble, que, aunque pierde algo de espacio, se gana en organización y comodidad. Entre lo que se pierde y lo que se gana, el resultado es más beneficios.
Por otro lado, los accesorios como gorros, corbatas, correas, bolsos y otros tipos de complementos se colocan en estantes fijos, conviene que los estantes se puedan mover cómodamente de altura, para evitar dejar espacios sin aprovechar. Y para las joyas, lo más conveniente es un joyero con espacios para collares, anillos, etc.
Agradecemos a Armarios Vellisa (empresa líder en Madrid) su colaboración para la creación de este artículo.
Deja una respuesta