Tener piscinas en verano es todo un lujo, pero una vez acaba la temporada, no debemos abandonarla si queremos disfrutarla la próximo temporada ya que si no la cuidamos durante el invierno nos puede costar mucho tiempo, esfuerzo y dinero tenerla como antes.
Si queremos dejar vacía nuestra piscina durante el invierno
Para disminuir el gasto en mantenimiento algunas personas deciden vaciar sus piscinas para el invierno, pero realmente les supone un gasto más elevado porque la impiedad del clima le generará daños estructurales, azulejos rotos, paredes descascaradas y las filtraciones de agua podría suponer un problema sin resolver.
El invernaje de una piscina, la clave de un buen mantenimiento de piscinas
Hibernar una piscina de cloro
Para mantener nuestra piscina llena de agua todo el año tenemos varias opciones:
La primera es mantener durante el invierno la piscina como en el verano, pero requiere mucho esfuerzo y no se recomienda si donde se encuentra puede congelarse.
La segunda es la hibernación de la piscina, que consiste en tratar el agua con un producto especial, (invernador) que preserva las condiciones de la misma. Cuándo las temperaturas descienden alrededor de los 14ºC (para que los microorganismos no se puedan reproducir) se vierte el invernador. Deberás controlar el estado del agua cada dos o tres semanas.
Con la hibernación el tiempo de filtrado y la cantidad de sustancias químicas usadas son inferiores a las de la época de verano.
Hibernar una piscina de sal
El invernaje en las piscinas de agua salada es muy simple. Debemos hacer una limpieza general, controlar el pH, la dureza, la alcalinidad del agua y, por último, comprobar los niveles de sal.
Piscinas Prefabricadas
Mantenimiento de piscina de cloro en invierno
El mantenimiento de piscina con cloro en invierno suele ser más trabajoso que el de las piscinas con sal. Lo primero que tenemos que hacer es limpiar los filtros y comprobar el pH. Después aplicamos clarificador y alguicida o pastillas con función desinfectante.
La electrólisis salina evita que el agua de nuestra piscina se pudra. Debes cuidar tu piscina con cloro y pasar el limpiafondos cada quince días para que esto no ocurra y filtrar el agua regularmente para que el tratamiento con cloro tenga mejores resultados.
Una vez tenemos el agua preparada, pasamos a cubrir la piscina.
Cómo tapar nuestra piscina en invierno
Saber cubrir bien nuestra piscina es esencial para el invierno ya que nos evitará de que entre suciedad al interior sin que salga volando nuestra lona.
Lo primero antes de cubrirla es bajar un poco el nivel del agua y acondicionar las tuberías para que no sufran congelaciones, después limpiar el filtro y la piscina. El pH debe estar equilibrado, siendo sus valores adecuados entre 7,2 y 7,6. Debemos quitar el equipo de limpieza y los accesorios decorativos que estén a la intemperie y guardarlos protegidos de la luz solar.
Una vez lo tenemos todo controlado, queda poner la lona; la extendemos y sujetamos el cobertor a los bordes con los orillos perimetrales. Los anclajes de acero inoxidable son los más recomendables por su duración y resistencia.
Aparte de la lona tradicional, también hay otras con barras de seguridad para mantener la piscina más segura. También hay cobertores de piscina automáticos que al ir con control remoto deben ser instalados por un profesional.
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