sofa infantil

Sofás infantiles: ¿quién dijo que la elegancia en el mobiliario sea cosa únicamente de adultos?

Está claro que cuando dilucidamos sobre cómo será la decoración de una habitación infantil, rara vez se nos ocurre pensar con el «chip» de los adultos. Siempre (o casi siempre) pensamos en tonos suaves y mobiliario claramente infantil. Pues hoy, desde Decoraccion queremos acercaros una idea que podrá hacer que deis un vuelco a vuestras ideas preconcebidas, al igual que lo hemos hecho nosotros.

Una de las piezas fundamentales para este tipo de decoración es el sofá o la butaca para la habitación de nuestros hijos. Pero no la nuestra, no, si no una pieza a su medida, un sofá infantil que no tenga nada que envidiar al que querríamos lucir en nuestra sala de estar y que es el centro de nuestras reuniones con amigos o familiares. Los más pequeños pueden presumir de varios diseños de sofás a su medida que más de un padre le va a generar envidas (sanas, por supuesto).

Por ejemplo, podemos encontrar el clásico diseño de sofá atemporal, como lo es el Chester, en terciopelo y con varios colores donde poder elegir, pero eso sí, siempre a la medida de nuestros más pequeños.

Claro está, las opciones no se acaban con el clásico modelo de sofá que jamás pasará de moda, también existen otros modelos más modernistas y en varios colores o materiales, dependiendo, claro está, del ambiente que queramos dar al cuarto de los pequeños y de sus gustos particulares.

No olvidemos que siempre existe la opción de la butaca. Un asiento individual para ellos, que verán como no solo imitan a sus padres en su manera de actuar, sino que también tienen muebles parecidos a los de sus ejemplos a seguir.

Y todo ello, siempre puede complementarse con elementos infalibles como cojines o mantitas también a su medida.

Pero no vamos a olvidarnos de los gustos de los pequeños protagonistas. Ya que, allí, en «su refugio», es el lugar donde mejor poder expresar sus gustos o inquietudes. Encontramos también en este campo un lugar en el que poder hacerlo. Ya sea con una tapicería con los colores de su equipo de fútbol, con formas concretas que representen alguna parte de su personalidad. Será algo que, sin duda, hará que a los niños les brillen los ojos de una manera especial.

Dicho todo esto, parece que no puede haber más opciones que las expresadas, pero existen incluso sofás modulares cuyas piezas sueltas pueden conformar un nuevo escenario de juegos cada día: toboganes, saltos o su particular «rocódromo», todo perfectamente encajable, cuya forma original vuelve a ser un sofá perfecto para la habitación de nuestros hijos, una vez acabe la sesión de juegos.

Solo hace falta decidirse ante tanta variedad de opciones, conocer los gustos y necesidades de los pequeños de la casa y ¡a decorar se ha dicho!


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