Se acerca el invierno, que cada vez es más fuerte, así que es importante mantener la caldera bien acondicionada y puesta a punto para poder ahorrar dinero y mantener el hogar caliente para enfrentar los días fríos.
Una caldera de condensación puesta a punto significa que no vamos a pasar frío y que no habrá desperdicio o sobrecarga en el consumo de gas. Todo es posible si el mantenimiento de la caldera se hace de forma regular.
Lo recomendado por todas las marcas, incluidas la marca fabricante de calderas Junkers, es realizar una revisión cada año. En esa inspección se revisa el estado general de la caldera y se revisa que no hay fugas. La inspección de este sistema incluye las tuberías y todos los elementos.
Revisión y limpieza de la caldera
Como todo, mientras más limpio es mejor. Así que es obvio que una caldera limpia y en óptimas condiciones va a tener un funcionamiento al 100%; las juntas también deben evaluarse, para evitar que un fallo reduzca el funcionamiento de la caldera.
La limpieza de la caldera es necesaria pues con el paso del tiempo, el agua genera sedimentos que pueden endurecerse en la parte inferior del artefacto, lo que se conoce como incrustaciones, las cuales pueden disminuir la eficiencia energética y la vida útil de la caldera.
Asimismo, las rejillas de la ventilación y las conexiones eléctricas deben estar limpias y despejadas, al igual que las tuberías de agua y gas. Es necesario verificar la presión de la caldera, no debe estar ni muy baja y ni muy alta.
Por otro lado, también es necesario poner a funcionar la caldera (a modo de prueba) sin importar que no sea invierno, esto es para estar seguros de que todo marcha bien. Si realizamos una puesta a punto correctamente garantizamos el funcionamiento óptimo y un ahorro monetario.
¿Cómo funciona un sistema de climatización con caldera de gas?
Elementos de climatización para el invierno
Entender cómo funciona la climatización en el hogar también es importante, pero si es poca o mucha la climatización es un criterio personal.
La climatización de un ambiente incluye tres estaciones: ventilación, refrigeración y calefacción, que ya la tenemos con la caldera. Todas constituyen un costo energético, unas más que otras, pero son necesarias para el funcionamiento orgánico.
El calentamiento
Este es un proceso de adición de calor al aire por medio de una recta y su función es conservar el vapor en el aire. Este mecanismo está presente en cualquier sistema de calefacción, sea eléctrico por conducto de agua-gas o por invernaderos.
Enfriamiento
El enfriamiento se da cuando el agua aumenta su temperatura gélida y ve un incremento en la humedad. Para este proceso es necesario el vapor del agua y el calor también y de esta forma se logra el aire frio.
Teniendo en cuenta estos procesos y llevando el mantenimiento adecuado del la caldera, todo irá bien en los días fríos y también en los cálidos. Lo ideal es lograr sistema de climatización que se ajuste a tu hogar.
Mantenimiento técnico de las calderas
Para que los sistemas calefacción y agua caliente funcionen en las mejores condiciones y ejerzan el mejor rendimiento, se recomienda realizar inspecciones periódicas para que las posibles averías se descubran a tiempo antes de que se agraven.
Firmar un contrato de mantenimiento para su caldera hará que su hogar se sienta más seguro y tranquilo porque puede olvidarse de su equipo y de las inspecciones periódicas que necesita. También puede reducir los costos de energía porque la instalación estará optimizada al 100%.
La contratación de un servicio de mantenimiento ayudará a su familia a evitar gastos inesperados. El Servicio Técnico de Calderas de Electroyclima le brinda a sus clientes servicios a medida, que incluyen revisiones anuales obligatorias, desplazamiento gratuito de técnicos y asesoría en todo el mantenimiento requerido para su caldera.
¿Es obligatoria la revisión anual de mi caldera?
Toda la normativa sobre instalación, mantenimiento e inspección de calderas de gas se detalla en el Reglamento de Instalaciones Térmicas de Edificios (RITE), que especifica el plazo obligatorio para la inspección de equipos de calefacción y producción de agua caliente.
La ley estipula que las calderas de gas deben inspeccionarse cada dos años y los calentadores de agua con una potencia inferior a 24,5 kilovatios deben inspeccionarse cada cinco años. Las calderas que no son de gas, como las calderas diésel, se inspeccionan una vez al año y el equipo de aire acondicionado doméstico se inspecciona cada cuatro años.
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