La restauración de muebles es una labor que tiene dos objetivos, uno dar mayor valor económico a una pieza antigua o adaptarlo a su utilización diaria. La elección de un buen taller deberá estar basada esencialmente en la elección de unos profesionales con la necesaria formación y experiencia restauradora.
Con independencia de que busquemos Restauradores de Muebles que trabajen presencialmente o que sean restauradores muebles a domicilio es importante saber que si queremos dar un mayor valor al mueble que tenemos, los profesionales deberán restaurar los materiales del mueble, sin que se cometan falsificaciones históricas, pues los vestigios de su historia no se deben eliminar.
Para dar una vida nueva, los Restauradores de muebles antiguos utilizan diversas decoraciones como la pátina, textura, la pintura o el mosaico. Hablamos de una serie de técnicas que suponen una ventaja a nivel económico, pues es más barato optar por la renovación de los muebles viejos que adquirir unos nuevos.
¿Cómo debe ser el profesional del taller?
A la hora de elegir un profesional de entre el elenco de restauradores de muebles que estemos valorando, habrá que optar por uno que tenga extensos conocimientos de arte, pero también de química y grandes conocimientos técnicos, puesto que los fallos pueden dar como resultado cambios en el diseño o una gran devaluación de los artículos.
El restaurador debe contar con una ética profesional que le permita no solo saber lo que hace, también explicar lo que está haciendo, de forma que el cliente pueda entender el trabajo que se está realizando.
¿Cuál es el proceso restaurador de los muebles?
Para una mejor selección del profesional, nunca está de más conocer el proceso de trabajo que realizan a la hora de afrontar su labor.
Analizar el mueble
Se procede a realizar por parte del taller de restauración de muebles un análisis del estado del mueble, así como del estado de conservación en el que se encuentra y el deterioro que tiene para implementar una serie de medidas. El presupuesto va a basarse en el plazo para la ejecución del trabajo y los costos que se estimen de los materiales que sean utilizados.
Se identifica el acabado
La determinación de la clase de acabado es fundamental, puesto que los errores en este sentido pueden tener fatales consecuencias para el mueble. Los acabados básicos naturales son el barniz, la laca o la goma laca. Algunos acabados pigmentados como el esmalte o la pintura son sencillos de ser identificados, al igual que los acabados de cera o aceite se pueden identificar al tacto.
Desmontaje del mueble
Básicamente, trata del desmontaje del mueble para realizar el debido tratamiento en cada una de las partes de las que se compone.
La necesaria desinfección
Se eliminan las termitas en el caso de que existan en las zonas y se inmuniza toda la madera, especialmente en las zonas interiores y posteriores, que tal y como nos comentan los expertos en restaurar muebles de madera tienen una mayor vulnerabilidad.
Higienizar y rehidratación
Para ello es aconsejable que se haga una limpieza química y mecánica de las piezas, más concretamente en los huecos. De la misma forma, la rehidratación de la madera se tiene que hacer con compuestos de lanolina, almendra, copal o aceite de cedro.
Reintegración
Restauración o reconstrucción de carácter estético con resina de tipo acrílico de las piezas que puedan faltar en los ornamentos. Una de las etapas donde el trabajo es más delicado, que lo ideal es que se reduzca lo mínimo posible el efecto reparador distinto al que en origen estaba compuesto el mueble.
Ensamblado
Las partes pasan a ser ensambladas de nuevo en su sitio. Una vez se realice, se pasa a aplicar una cera hidratante para obtener brillo y se crea una capa de protección con efecto aislante para el mueble.
Deja una respuesta