Bomba de calor

¿Qué bomba de calor necesito para mi piscina?

Gracias a la piscina podemos disfrutar de un baño agradable en los meses de más calor y así soportar mejor las altas temperaturas que suelen venir de la mano de los meses de verano. Pero, en ocasiones y especialmente fuera de la temporada estival, el baño no resulta del todo agradable o posible porque la temperatura del agua no es la más adecuada. En ese tipo de casos se suele recomendar usar mecanismos que ayudan a mantener el calor en las piscinas, como las mantas térmicas o las bombas de calor. Gracias a estas bombas se consigue aportar temperatura al agua y, en consecuencia, alargar la temporada de baño. Recuerda, la temperatura perfecta para el agua se sitúa entre los 27 y los 29 grados. Y con una bomba de calor es más fácil conseguirla.

¿Cómo funciona una bomba de calor?

Hablamos de un equipo termodinámico que tiene un funcionamiento bastante sencillo una vez realizada la instalación. A través de la unidad conocida bajo el nombre “evaporador” se consigue extraer el calor exterior para aportarlo al agua de la piscina. Eso hace que el calor que se aporta al agua casi venga del aire. Para que te hagas a la idea, el 80% del calor proviene del aire y solo el 20% de la electricidad con la que funciona.

La instalación de la bomba de calor es bastante sencilla, aunque normalmente se suele recomendar la instalación por parte de profesionales. No importa si la piscina es de nueva creación o ya está hecha, en ambos casos se puede incluir una bomba de calor sin problema alguno.

Bomba de calor piscina

¿Merece la pena instalar una bomba de calor?

La respuesta es sí. Como podemos ver en PiscinasAthena, en la actualidad hay muchas bombas de calor entre las que elegir. Lo importante es instalar la que mejor encaja con nuestras necesidades y presupuesto. Pero como podrás comprobar, el coste económico no es muy grande, sobre todo si tenemos en cuenta la amplia variedad de ventajas que vamos a obtener con ella.

Gracias a la ayuda de una bomba de calor, no solo vamos a poder disfrutar de una temperatura más agradable en los meses de más calor, sino que también conseguiremos alargar la temporada de baño. Eso significa que vamos a sacar una clara rentabilidad a la inversión que hemos realizado. Piensa que la construcción de una piscina no es barata, de aquí que sea una buena idea usarla durante varios meses al año. Así se puede decir que la inversión se amortiza en un periodo de tiempo inferior y se puede sacar más provecho a la piscina.

Con la ayuda de una bomba de agua, ya no nos tenemos que esperar a los meses de más calor para disfrutar de un baño agradable. Es capaz de calentar el agua a la temperatura perfecta y así conseguir que podamos disfrutar de un baño agradable en cualquier época del año. Eso está haciendo que cada vez sean más las personas que usen esta herramienta para mantener la temperatura del agua. ¿No has probado a darte un baño en la piscina en invierno? Normal si no dispones de una bomba hasta el momento. Pero te puedo asegurar que la experiencia es agradable cuando la temperatura es la óptima para el baño. Si en verano te gusta la piscina, en invierno no te va a decepcionar. Son experiencias muy placenteras que hacen que la inversión merezca la pena.

¿Qué debe tener una bomba de calor de calidad?

Nunca debemos comprar el primer modelo que encontremos en el mercado. Siempre tenemos que fijarnos que sus características son las adecuadas a nuestras necesidades. Por ese motivo debemos fijarnos en las siguientes características a la hora de elegir la bomba de calor más adecuada para nuestra piscina:

  • KW de potencia: siempre tenemos que fijarnos en la potencia que tendrá la bomba a la hora de calentar el agua. Para adquirir una bomba adecuada, lo que se suele recomendar es multiplicar los m3 por 0.3. El resultado muestra cuál es la potencia que debería tener para poder calentar correctamente el agua. Es un cálculo aproximado, por lo que siempre suele ser mejor que la potencia sea ligeramente superior al dato obtenido.
  • COP: es el coeficiente de rendimiento de la bomba. Cuanto mayor sea el dato, mejor será la eficiencia energética. Eso sí, el problema viene dado a que el COP no siempre se analiza bajo las mismas condiciones. Eso significa que los datos siempre deben ser obtenidos como datos aproximados.
  • Norma NF: no todas las bombas tienen este certificado, pero puede ser una buena opción para un modelo que sí lo tenga. Si cuenta con el certificado quiere decir que los rendimientos se han comprobado. A eso hay que añadir que la empresa tiene una auditoría anual y ofrece una buena garantía de servicio a los clientes en postventa.
  • Desescarche: para que pueda funcionar durante todo el año, es fundamental que el modelo elegido cuente con la funcionalidad de desescarche. El objetivo es que cuando la máquina comience a notar escarcha, comience a trabajar para evitar que el problema vaya a más. Puedes tener la certeza de que, si la máquina sufre escarcha, no funcionará y sobre todo perderá parte de su rendimiento. Por ese motivo, es un extra que deberías tener en cuenta en la compra final. En la actualidad se puede elegir desescarche por ventilación o por inversión de ciclo, siendo este último la opción más efectiva.
  • Temperatura mínima: es otro detalle a tener en cuenta, sobre todo si queremos usar el equipo incluso en invierno. No todas las bombas son capaces de trabajar a la misma temperatura. Hay modelos que a los 0 grados dejan de funcionar y otras que son capaces de resistir temperaturas inferiores sin perder la calidad de trabajo. Dependiendo de la zona geográfica en la que te encuentres, deberás fijarte más o menos en este dato.
  • Función reversible: un extra que comienzan a traer los modelos más modernos. La ventaja es que en este caso la bomba no solo calienta, sino que también es capaz de rebajar la temperatura del agua. El objetivo es conseguir un baño agradable y con este sistema se consigue tanto en verano como en invierno.
  • Nivel sonoro: es vital que la bomba no haga mucho ruido. Si hay demasiado ruido, lo que se consigue es una incomodidad sonora que no permite la relajación durante el baño.

Si tienes en cuenta todos estos detalles, podrás tener la certeza de que vas a adquirir la bomba adecuada a tu piscina. Así podrás disfrutar de un muy buen baño.


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