Alquilar tiene muchas ventajas como por ejemplo que no tendremos problemas si esta casa se quedara pequeña o tenemos que salir de la ciudad para aceptar un nuevo trabajo en el extranjero. Además, comprarse un piso hoy en día está bastante complicado. Alquilar también tiene sus puntos negativos, como que todos los cambios estructurales e incluso los colores de las paredes deberán pasar por la aprobación del propietario.
Por ello a la hora de decorar una casa de alquiler, es vital saber cómo es el propietario del piso. Normalmente, cualquier propietario no pone problemas a su inquilino en dar permiso para pintar una pared de un color determinado. Esa es una de las maneras más interesantes de actualizar un apartamento sin gastar mucho dinero.
Nos sorprenderíamos de lo que puede cambiar una estancia al cambiar simplemente el color.
Aunque no es lo normal, quizá un propietario no deje personalizar las paredes, entonces podemos optar realizar nuestra propia decoración mediante cuadros, láminas o fotos. No es lo mismo que pintar una pared, pero sin duda aportará personalidad.
Si el propietario es muy estricto en el tema de la decoración, siempre se pueden optar por trucos como unas nuevas cortinas a nuestro gusto. Esto dará mucha vida y color a la casa. Las cortinas viejas las guardamos en una caja bien sellada con todos sus accesorios para antes de irnos de esa casa, poder volver a colgarlas tal cual estaban.
Con este mismo sistema podemos optar por cambiar la decoración, mediante estanterías nuevas, los apliques y lámparas (guardando los antiguos, claro), la cobertura de las duchas o los textiles, que siempre son un punto interesante en la decoración de un hogar.
Con complementos como jarrones, floreros, ceniceros, cajas y baúles decorativos, cuadros, figuras, espejos, etc, podemos dar un aire nuevo y renovado a toda la casa gastándonos poco dinero. Cuantos más complementos decorativos nuestros haya por la casa, más a gusto y menos extraños nos sentiremos en ella sobre todo los primeros días.
Por ejemplo, si alquilamos una vivienda y nuestra casa no está amueblada, sin duda alguna contaremos con mayor libertad para hacerla más personal. Si por el contrario lo está, siempre se pueden actualizar muebles sin necesidad de cambiarlos por ejemplo comprando fundas de sofá o caminos nuevos para las mesas.
Es importante recordar que la inversión que hagamos en esta casa debe ser en elementos que posteriormente podamos llevarnos.
Debemos tener claro que cuando llegue el momento de hacer la mudanza, es recomendable buscar en alquiler trasteros, para poder guardar nuestra cosas mientras nos mudamos de una casa a otra para que nos resulte mucho sencillo.
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