En los tiempos que corren, ahorrar es más importante que nunca. Cualquier consejo es bienvenido, y más si se trata de algún truco para llegar mejor a fin de mes. Hoy queremos hablarte de cómo ahorrar en la factura de la luz.
De 2006 a 2011, el gasto en electricidad de los españoles creció de media 14% anual y aumentó un 20% durante desde el 2012 al 2016. Por lo tanto es importante revisar el uso que hacemos de la energía para evitar que estas subidas acaben afectando a tu bolsillo más de la cuenta.
Ya hemos dicho alguna vez de que utilizar electrodomésticos eficientes puede hacer que te ahorres un buen montón de euros cada mes. Pero seguro que últimamente también has oído hablar de la peculiar forma de facturar el gasto eléctrico.
Las facturas de la luz se dividen en dos bloques fundamentales sobre los que podemos actuar: una parte fija (la potencia contratada) y una parte variable (nuestro consumo mensual de energía).
Desde finales del año 2013 pagamos más por la parte fija que por la variable, así que parece lógico revisar nuestras necesidades y rebajar la potencia de nuestro servicio si no le sacamos partido. Podemos poner en practica un par de consejos, como por ejemplo:
- Revisar la potencia contratada. En una vivienda de 4 habitaciones para la que tengamos contratados 6 kW de potencia eléctrica, si reducimos a 4,5 kW la potencia, podríamos ahorrar alrededor de 60 euros al año. Dinero que podríamos utilizar en mejorar nuestros sistemas de iluminación pasándonos a la tecnología LED. De este modo el ahorro es doble.
- Apostar por electrodomésticos eficientes. Los electrodomésticos consumen una parte importante de la energía de un hogar y te puedes ahorrar hasta 30€ si tu frigorífico es A+++ frente a uno A+.
No está mal, ¿verdad?
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